Las variables de entorno son un poderoso recurso en Docker que nos permiten configurar ciertos aspectos de nuestro contenedor sin la necesidad de modificar nuestra imagen. Se pueden utilizar para diversos propósitos como definir valores que varían entre despliegues, definir rutas, contraseñas, nombres de base de datos entre otros.
Para utilizarlas, existen varias formas:
1. Directamente en el comando `docker run`
Podemos utilizar el flag `-e` seguido de `NOMBRE_VARIABLE=valor` para definir variables de entorno al momento de instanciar un contenedor.
Ejemplo:
```sh
docker run -e TEST_ENV=Test -d nombre_imagen
```
2. A través de un archivo
También podemos definir todas nuestras variables de entorno en un archivo y luego leerlo con el flag `—env-file` al instanciar el contenedor.
Primero debemos crear el archivo con nuestras variables:
```env
Luego leerlo al instanciar el contenedor:
```sh
docker run —env-file ./.env -d nombre_imagen
```
3. En el archivo Dockerfile
Otra alternativa es describir nuestras variables de entorno directamente en nuestro Dockerfile con la directiva `ENV`.
```Dockerfile
FROM ubuntu
ENV TEST_ENV=Test
```
Esto último hará que todas nuestras instancias de la imagen tengan esta variable de entorno por defecto. Tenga en cuenta que este método es menos flexible que los anteriores y se recomienda utilizarlo para valores que no varían entre despliegues o entornos.
Recuerde que puede reemplazar estas variables en tiempo de ejecución con los métodos anteriores permitiendo así una mayor flexibilidad en los despliegues.
Para acceder a estas variables de entorno en sus aplicaciones, por lo general cada lenguaje o framework tiene su propia forma de hacerlo. Debe buscar la documentación de su respectivo lenguaje/framework para saber cómo hacerlo correctamente.
Además, refiera a la documentación oficial de Docker para obtener más información sobre las variables de entorno.
