El cifrado de extremo a extremo es un método de encriptación de datos que garantiza que la información transmitida solo pueda ser leída por el emisor y el receptor, sin posibilidad de ser interceptada por terceros.
El funcionamiento del cifrado de extremo a extremo se basa en el uso de una clave de cifrado única y privada que solo conoce el emisor y el receptor. Esta clave se utiliza para transformar los datos originales en una forma ininteligible, denominada texto cifrado, que solo puede ser descifrado utilizando la clave de descifrado correspondiente, que solo es conocida por el receptor.
Cuando el emisor envía un mensaje cifrado, este se envía a través de internet o la red de comunicación correspondiente. Durante esta transmisión, los datos cifrados son ilegibles para cualquier entidad que intente interceptarlos. Una vez que el mensaje llega al receptor, este usando la clave de descifrado privada, puede descifrar los datos y leer el mensaje original.
En resumen, el cifrado de extremo a extremo garantiza la privacidad y seguridad de los datos transmitidos a través de la red, impidiendo el acceso a los mismos por terceros y evitando cualquier manipulación o alteración no autorizada.
