Los principales problemas de seguridad con las cookies HTTP son los siguientes:
1. Robo de datos: las cookies HTTP pueden ser robadas por atacantes malintencionados, lo que permite acceder a información confidencial.
2. Suplantación de identidad: los hackers pueden utilizar las cookies robadas para suplantar la identidad de los usuarios y acceder a sus cuentas.
3. Cookies persistentes: algunas cookies HTTP pueden permanecer en el sistema del usuario durante un largo período de tiempo, lo que aumenta el riesgo de robo o suplantación de identidad.
4. Interceptación: las cookies HTTP se transmiten sin cifrar, lo que las hace vulnerables a la interceptación por parte de terceros.
5. XSS: los ataques XSS (Cross-Site Scripting) pueden permitir a los hackers robar cookies HTTP o manipular su contenido.
6. Cookies de terceros: las cookies HTTP de terceros pueden ser utilizadas para rastrear la actividad de los usuarios en diferentes sitios web, lo que plantea problemas de privacidad.