La compresión HTTP es un proceso que permite reducir el tamaño de los datos transferidos en una comunicación HTTP, lo que permite una transferencia más rápida y eficiente de la información. En lugar de enviar datos completos, la compresión HTTP identifica patrones repetitivos en los datos y los reemplaza por una marca de posición más pequeña. Al destinatario se le envía un archivo más pequeño que, cuando se descomprime, contiene los datos originales tal como se necesitan. Esto reduce el tiempo de carga de los sitios web y hace que la navegación por la web sea más rápida y fluida en general.