SSH (Secure Shell) es un protocolo de red que permite conectar y controlar de manera segura un servidor remoto a través de una red pública. El protocolo se basa en la criptografía asimétrica, lo que significa que utiliza dos claves diferentes: una clave privada y otra clave pública.
Cuando un usuario se conecta a un servidor remoto a través de SSH, el servidor verifica la identidad del usuario. Para ello, el servidor solicita al usuario la clave pública correspondiente a la clave privada que utiliza para conectarse. Si la clave pública del usuario coincide con la clave privada del servidor, se establece una conexión segura.
Una vez que se ha establecido la conexión segura, todas las operaciones que se realicen a través de SSH (como la transferencia de archivos, la ejecución de comandos en el servidor remoto o la gestión de aplicaciones) se realizan de forma encriptada, dificultando que terceros puedan interceptar la información.
Asimismo, SSH también permite la autenticación de dos factores, lo que significa que para acceder al servidor remoto es necesario proporcionar un código de seguridad adicional además del nombre de usuario y la contraseña.
En resumen, SSH funciona mediante el uso de la criptografía asimétrica para establecer una conexión segura entre un usuario y un servidor remoto, y permite realizar operaciones encriptadas para garantizar la privacidad y seguridad de la información.