TCP evita los paquetes duplicados mediante el uso de números de secuencia y ACKs (confirmaciones de recepción). Cada paquete enviado por TCP tiene un número de secuencia único asignado que indica su posición en la secuencia de transmisión. El receptor envía un ACK al emisor para confirmar que ha recibido correctamente el paquete. Si el emisor no recibe un ACK para un paquete enviado, lo reenvía. Si el receptor recibe un paquete duplicado, lo ignora porque ya ha enviado un ACK para ese número de secuencia. De esta manera, TCP asegura que los paquetes no se duplican en la red y se entregan correctamente.