Un servidor privado virtual (VPS, por sus siglas en inglés) es un servidor virtual que el usuario percibe como un servidor dedicado, pero en realidad es instalado en una computadora que atiende a múltiples sitios web. En otras palabras, se puede considerar una habitación separada en una de las casas grandes de un proveedor de alojamiento.
Una computadora física en el centro de datos de la empresa de hosting puede albergar varios servidores VPS, cada uno de los cuales puede ejecutar su propio sistema operativo, lo que permite a los propietarios de los VPS root access (acceso completo) a su propio entorno virtual. Esto significa que cualquier usuario del servidor VPS puede instalar las aplicaciones que necesite o desee apoyar.
Desglosemos cómo funciona:
1. División: Una vez que tu proveedor de alojamiento instala un VPS, este puede dividir el servidor físico en diferentes partes. Cada VPS funciona como una entidad única y separada. Aunque comparte espacio en el mismo servidor con otros VPS, tus datos y funciones no se ven afectados por las operaciones de otro VPS.
2. Sistema operativo independiente: Cada VPS tiene su propio sistema operativo (SO). Esto permite a los usuarios manejar y configurar su servidor VPS sin afectar a otros usuarios en el mismo servidor.
3. Acceso root: Los sistemas de VPS proporcionan a los usuarios acceso root a la máquina virtual. Esto permite a los usuarios tener control total sobre su entorno virtual, lo que significa que pueden configurar el VPS de acuerdo a sus necesidades, instalar su propio software e incluso ajustar las configuraciones del servidor.
4. Recursos garantizados: A pesar de compartir un host físico con otros usuarios de VPS, cada VPS tiene una cantidad específica de recursos del sistema reservados para su uso. Esto garantiza que la actividad en un VPS no afectará los recursos disponibles para otro.
5. Seguridad: Aunque los VPS comparten el mismo hardware, cada uno opera en su propia máquina virtual aislada. Esto significa que cualquier problema de seguridad será confinado a ese VPS en particular y no afectará a los demás.
En resumen, un servidor VPS te da el control total sobre un entorno de “casa propia” sin las preocupaciones de hardware y reúne lo mejor del alojamiento compartido y dedicado en un solo paquete.
