Los tokens no fungibles (NFT) son una forma de criptomoneda que representan la propiedad de objetos digitales únicos como obras de arte digital, videos, música y otros medios digitales. Los NFT funcionan en una cadena de bloques, lo que significa que cada token es único y existe en una cadena de bloques separada, lo que lo hace irrepetible y auténtico.
Un token no fungible típicamente se crea a través de un proceso de minería, en el que se asegura la propiedad y se registra en la cadena de bloques. Cada NFT tiene un código único que lo identifica y se almacena en una cadena de bloques descentralizada, lo que significa que se actualiza automáticamente y es imposible de falsificar.
Cuando se compra un NFT, el comprador adquiere la propiedad exclusiva del objeto digital que representa el token. El comprador puede vender, intercambiar o incluso obtener una licencia de uso del objeto digital, pero siempre conservará la propiedad del token NFT.
En resumen, los NFT funcionan como un medio para asegurar la propiedad de objetos digitales únicos en una cadena de bloques, lo que les da un valor único y los hace coleccionables.
