Zimbra, al igual que la mayoría de los sistemas de correo electrónico, tiene varias formas de filtrar el spam. Aquí te decimos cómo:
1. Habilita el Filtrado de Spam: La primera línea de defensa es habilitar el filtrado de correo no deseado. En caso de que no esté habilitado, debes ir a la sección de configuración y activar el filtrado de spam.
2. Crea filtros personalizados: Zimbra tiene la capacidad de crear filtros personalizados que se pueden usar para bloquear correos electrónicos no deseados. En la configuración de preferencias de correo, puedes crear reglas para mover automáticamente ciertos mensajes a la carpeta de spam.
3. Bloquear direcciones de correo: Si estás recibiendo correo no deseado de una dirección específica, puedes bloquear esa dirección. Ve a la configuración de preferencias de correo y agrega esa dirección a la lista de bloqueados.
4. Marcar correos como spam: Asegúrate de marcar cualquier correo electrónico que recibas como spam. Esto ayudará a Zimbra a aprender qué tipo de correos electrónicos debes considerar como correo no deseado.
5. Usar una lista negra: Las listas negras son listas de direcciones IP conocidas por enviar spam. Puedes configurar Zimbra para que use listas negras y evite los correos electrónicos de estas direcciones IP.
6. Asegúrate de actualizar y mantener tu Zimbra: Las versiones más recientes del software suelen tener mejores capacidades de filtrado de spam y otras características de seguridad.
Por último, ten en cuenta que ningún sistema es perfecto. Puedes hacer todo lo posible para minimizar la cantidad de spam que recibes, pero siempre existe la posibilidad de que algunos mensajes de spam pasen a través del filtro.